Tengas o no una persona especial a quien darle unos besos, vivir con mal aliento es sumamente incómodo. No podemos estar dependiendo del cepillo de dientes en todos lados ni en los chicles de menta todo el día. Aquí te presento unos sencillos tips para seguir en tu dieta para tener siempre aliento fresco y agradable:
Mantente bien hidratada
Suena a disco rayado, pero debes beber aproximadamente dos litros (8 vasos) de agua simple por día. El estar hidratada no sólo hace que tu piel esté reluciente y que tu cerebro funcione al cien. El agua que uno constantemente esté tomando a lo largo del día ayudará a remover las bacterias de la boca para que no se reproduzcan sin control y mantenerlas a raya. Si te cuesta trabajo tomar agua simple, puedes recurrir a tés e infusiones sin azúcar. OJO: Limita tu consumo de café y de té negro, pues la cantidad de cafeína daña el esmalte de tus dientes, haciéndolos vulnerables a las bacterias.
Evita azúcares y harinas refinadas
¿Te acuerdas cuando éramos niños y el dentista te decía que, si comías muchos dulces, te iban a salir caries? Pues es verdad. El alimento favorito de las bacterias de la boca son los carbohidratos simples, que los podemos encontrar en caramelos, bebidas endulzadas, refrescos, papitas y galletas. Evítalos y procura incluir en tus colaciones alimentos con grasas y/o proteína, como cacahuates, nueces y semillas. Estos dos nutrimentos son cariostáticos, es decir, no son consumidos por las bacterias.
Incluye alimentos ricos en probióticos
Muchas veces, por más que te laves los dientes y masques chicles de menta, el mal aliento no viene de la boca, sino desde el estómago. Esto es una señal de que nuestro tracto gastrointestinal no está del todo sano. Consumir alimentos con probióticos, como yogurt, kéfir y kombucha, ayudará a regular tu microbiota intestinal, no sólo mejorando tu digestión sino tu aliento.
Prefiere alimentos crujientes
Sobra decir que para tener siempre buen aliento tenemos que llevar una alimentación saludable y equilibrada, pero incluir alimentos crujientes, como apio, manzana, nueces y zanahoria cruda, ayudarán mecánicamente a limpiar tu boca.