La comida y bebidas fermentadas pueden añadirse al gusto a tus alimentos. Miso, Kimchi, yogurs con lactobacilos y leche kefir son excelentes fuentes de bacteria benéfica
Dejar de consumir productos orgánicos genéticamente modificados puede ayudarte a bajar de peso, pero también puedes mejorar tu salud consumiendo súper alimentos.
Además de lo que ya es ampliamente discutido sobre los peligros de consumir organismos genéticamente modificados (OGM), ahora se discute si tienen que ver con la pandemia de obesidad en Norteamérica. En Estados Unidos, el número de personas padeciendo obesidad se ha duplicado en los últimos veinte años y por coincidencia, también el número de productos alimenticios que contienen OGM.
En una dieta diaria promedio, un norteamericano consume entre 10 y 13 diferentes pesticidas cada día. Los súper alimentos no sólo son valiosos por sus altas propiedades nutrimentales, sino también porque consumiendo algunos de ellos ayudas a que tu estómago procese mejor los otros alimentos que comen.
Súper alimentos
Los súper alimentos son ítems nutrimentalmente densos y beneficiosos para la salud. Son fuentes poderosas de proteínas limpias, vitaminas, minerales, enzimas, antioxidantes, grasas saludables, aminoácidos y otros nutrientes que ofrecen un profundo nivel de nutrición.
Para encontrar los súper alimentos hay que buscar las siguientes características:
1) Densidad nutrimental: la medida de cuánto de cualquier nutriente particular.
2) Diversidad nutrimental: Los diferentes nutrientes disponibles en un solo ítem alimenticio.
3) Contenido fitonutriente: La cantidad de componentes químicos que existen en las plantas. Posiblemente hay miles de fitonutrientes en las plantas y cualquier súper alimento es una fuente de ellos.
4) Ausencia de toxinas: Los súper alimentos deben ser fuentes de nutrición limpias, libres de hormonas, químicos y pesticidas.
Aunque no hay un sólo alimento que provea todo lo que el cuerpo necesita, incluyendo la gran variedad de súper alimentos en la dieta diaria ayuda a obtener la mayoría de estos nutrientes sin consumir tantos de ellos.
Ayuda a tu estómago
La comida y bebidas fermentadas pueden añadirse al gusto a tus alimentos. Miso, Kimchi, yogurs con lactobacilos y leche kefir son excelentes fuentes de bacteria benéfica.
Para ayudar a mejorar la flora intestinal se puede tomar una cucharada de semillas de sésamo crudas, así como una cucharada de pasas. Ambas se deben masticar bien antes de tragarlas y hay que ingerirlas cada día.
El aceite de coco, preferiblemente orgánico, contiene ácidos grasos que son fácilmente convertidos a energía. También ayuda a prevenir el surgimiento de microbios y hongos dañinos.
En cuanto a las grasas, se recomienda ingerir semillas de chía, lo mismo que pescado, ambos proveedores de Omega 3.
Para las proteínas, se recomienda el poliplankton, como la espirulina, pues ayuda a adquirir muchas proteínas aún en pocas proporciones.
Dado el incremento por la preocupación por la salud en la población, muchas empresas están introduciendo una gran variedad de productos suplementales intentando imitar los efectos de los súper alimentos. Aunque los suplementos pueden ser no dañinos y hasta benéficos para la salud, es importante saber que el cuerpo humano reconoce y asimila los nutrientes que vienen de la comida, en vez de suplementos. De ahí que sea preferible consumir súper alimentos frente a los suplementos.